AHORA UNIDOS MÁS QUE NUNCA 15-M DEMOCRACIA REAL YA

domingo, 19 de septiembre de 2010

Festa des Vermar

La uva muere bajo mis pies, más bien resucita, transmutándose en ambrosía de dioses. Sigo pisando y siento como el mosto acaricia mis pies descalzos. Me creo un esclavo de Dionisos… ya voy dios, preparo tu brebaje mágico, aquel que nos transforma en mejores personas, aquel que nos inicia en los caminos de la muerte. Y es que los borrachos son los que se hallan más cerca de Thanatos. Pueden percibir su aliento, pueden vislumbrar la laguna Estigia y a Caronte en su balsa repleta de almas desoladas. Estrujo con fuerza, pero también con cierto arte. Por momentos pierdo el equilibrio y creo caer e impregnarme del líquido morado. Estoy arrodillado, como invocando clemencia a mi deidad. Me levanto aún más decidido y piso sin cesar. El néctar se desprende por el caño hacia la cuba, pronto iniciará su fermentación natural, pronto podrás saborear lo que saboreó Polifemo antes de quedar ciego. El listo de Odiseo, un don nadie para el gigante. El aroma invade mis fosas nasales, delicioso ese olor a uva recién prensada. Manto negro, sangre de esta tierra. Sería un detalle al beber un sorbo deslizar unas gotitas sobre el terreno, como agradeciendo a la tierra lo que nos ha dado. Eso hacen los astures con la sidra, dicen. Sería un modo de gratitud a la fertilidad antes de la decadencia del otoño, de la marchita estación donde todo cae y muere ¿Pero quién puede despreciar una pizca de ese fabuloso líquido al que llamamos vino?
Y ya dice un refrán:
“Más vale vaso de vino en mano que bodega en fotografía”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario